La celulitis frecuentemente se conoce como el acumulo de tejido adiposo en determinadas zonas del cuerpo formando nódulos de grasa, agua y toxinas. Otros nombres son: lipodistrofia ginecoide, síndrome de piel de naranja y piel en "colchón".
Existen varias técnicas que suelen realizarse como tratamiento de las celulitis, Daniela Mullner, cosmetóloga, nos explicó algunas de ellas:
Ultrasonido: es una frecuencia que actúa a una profundidad de dos o tres centímetros de la piel. Tiene efectos como el de reabsorción de edemas, aumentar la elasticidad y permeabilidad de la piel, estimular la micro circulación.
Corrientes excitomotrices: son aparatos de corrientes variables de baja frecuencia emitidas en forma de impulsos. Producen contracciones musculares con el fin de aumentar la tonicidad muscular combatiendo la flacidez y actuando sobre la circulación venosa.
Presoterapia: Suele utilizarse para el drenaje y la resolución de edemas. Consiste básicamente en unas botas en las que se introducen las piernas y gracias a un compresor se inflan progresivamente y en sentido ascendente.
Drenaje linfático manual: es un masaje atraumático que tiene efectos positivos en los problemas linfáticos, facilitando la salida de los materiales tóxicos retenidos en las zonas celulíticas.
La cosmetóloga aclaró que a la hora de hacer un tratamiento se lo debe acompañar con relajación y tranquilidad. En casos de obesidad o sobre peso se plantea una dieta de pérdida de peso. Si no es así, se sugiere una alimentación lo más sana posible. Además se debe realizar ejercicio moderado y sobre todo continuo.
Existen varias técnicas que suelen realizarse como tratamiento de las celulitis, Daniela Mullner, cosmetóloga, nos explicó algunas de ellas:
Ultrasonido: es una frecuencia que actúa a una profundidad de dos o tres centímetros de la piel. Tiene efectos como el de reabsorción de edemas, aumentar la elasticidad y permeabilidad de la piel, estimular la micro circulación.
Corrientes excitomotrices: son aparatos de corrientes variables de baja frecuencia emitidas en forma de impulsos. Producen contracciones musculares con el fin de aumentar la tonicidad muscular combatiendo la flacidez y actuando sobre la circulación venosa.
Presoterapia: Suele utilizarse para el drenaje y la resolución de edemas. Consiste básicamente en unas botas en las que se introducen las piernas y gracias a un compresor se inflan progresivamente y en sentido ascendente.
Drenaje linfático manual: es un masaje atraumático que tiene efectos positivos en los problemas linfáticos, facilitando la salida de los materiales tóxicos retenidos en las zonas celulíticas.
La cosmetóloga aclaró que a la hora de hacer un tratamiento se lo debe acompañar con relajación y tranquilidad. En casos de obesidad o sobre peso se plantea una dieta de pérdida de peso. Si no es así, se sugiere una alimentación lo más sana posible. Además se debe realizar ejercicio moderado y sobre todo continuo.
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